La aromaterapia se define como el uso controlado de los aceites esenciales de una manera positiva para mantener y revitalizar una buena salud del cuerpo, la mente y el espíritu. Según una conferencia llevada a cabo en Ginebra acerca de éstos, los aceites esenciales se definen como: «el producto exclusivo de la extracción de los principios aromáticos volátiles contenidos en las sustancias de las que se extrae (hojas, cortezas, cáscaras, frutos, tallos, flores, etc.)».
Es decir que, los aceites esenciales (también conocido como aceites volátiles) son los materiales básicos de la aromaterapia. Están hechos de esencias aromáticas que se encuentran en diversas plantas. Estas esencias se crean en células vegetales especiales, a menudo bajo la superficie de las hojas, la corteza, o cáscara, utilizando la energía del sol y los elementos del aire, suelo y agua. Si se machaca la planta, la esencia y su fragancia única se liberan.
La aromaterapia es una rama de la herbolaria que utiliza aceites vegetales concentrados (aceites muy ocasionalmente esenciales – no necesariamente los mismos que se utilizan en aromaterapia). Su objetivo es mejorar la salud física, mental o ambas. A diferencia de las plantas utilizadas en herbolaria, los aceites esenciales no se ingieren, sino que se inhalan o aplican en la piel.
Ésta es una disciplina terapéutica que aprovecha las propiedades de los aceites esenciales extraídos de las plantas aromáticas, para restablecer el equilibrio y armonía del cuerpo y la mente para beneficio de nuestra salud y belleza. El término aromaterapia per se fue utilizado por primera vez por el químico francés René-Maurice Gattefosé en 1935. La palabra «aroma» significa olor dulce, y «terapia», tratamiento diseñado para curar. A diferencia de otras terapias, el potencial curativo de la aromaterapia procede de su capacidad para promover la relajación y, al mismo tiempo, generar una sensación de alegría o tranquilidad en quien recibe el tratamiento.
Cuando se extraen esencias de las plantas en formas naturales, se convierten en aceites esenciales. Podrían ser destilados con vapor y/o agua, o presionados mecánicamente. Los aceites que se hacen con procesos químicos no se consideran verdaderos aceites esenciales. Es por ello que debemos percatarnos detenidamente en la etiqueta del producto. Ésta debe indicar claramente que se trata de un aceite esencial 100 % puro, integral y natural, también debe estar claramente indicado el nombre de la planta en latín. Es valorada la indicación de la procedencia de la planta y el órgano destilado.
Hay muchos aceites esenciales utilizados en aromaterapia, incluidos los de manzanilla romana, geranio, lavanda, árbol de té, limón, cedro, bergamota, entre otros. Cada tipo de aceite esencial tiene una composición química diferente que afecta a cómo huele, cómo se absorbe, y la forma en que es utilizado por el cuerpo. Incluso los aceites de las variedades de plantas de la misma especie pueden tener composiciones químicas diferentes unos de otros. Lo mismo se aplica a las plantas que se cultivan o cosechan en diferentes formas o lugares.
Los aceites esenciales son muy concentrados. Por ejemplo, se necesita alrededor de 220 libras de flores de lavanda para hacer alrededor de 1 libra de aceite esencial. Los aceites esenciales son muy volátiles, evaporándose rápidamente cuando se exponen al aire libre.
Historia de la aromaterapia
Se cree que la aromaterapia pasó a Occidente en los tiempos de las Cruzadas. Los registros históricos muestran que los aceites esenciales se utilizaron durante la peste del siglo XIV. En los siglos XVI y XVII la aromaterapia era popular entre los grandes herbolarios europeos, pero hasta los siglos XVIII y XIX los científicos no fueron capaces de identificar muchos de los compuestos específicos de la química vegetal.
Para 1896 la ciencia química se fue volviendo cada vez más importante. Se pensó que sería mejor aislar las propiedades terapéuticas de las plantas activas y utilizarlas solas, o mejor aún, sintetizarlas – un ejercicio mucho más barato, lo que permite tener gran cantidad disponible de manera uniforme (lo que no es posible con extractos naturales por sí solos). Los medicamentos producidos de esa manera – copias sintéticas de curación de la naturaleza – tienden a ser tóxicos y no tienen el mismo respeto por los tejidos humanos.
Éstos tienden a producir numerosos efectos secundarios (algunos graves) que a su vez necesitan tratamiento para sí mismos y un círculo vicioso se comienza. Muchas de las personas que se encuentran en el hospital hoy en día no están ahí por su enfermedad original, sino, debido a problemas causados como efectos secundarios de los medicamentos que se toman (enfermedad iatrogénica; La iatrogenia es un estado, enfermedad o afección causado o provocado por los médicos, tratamientos médicos o medicamentos). El uso de materiales naturales tales como las hierbas y aceites esenciales no dan lugar al aumento de dosificación – como es el caso con los productos sintéticos, a los que a menudo lo gérmenes pueden volverse resistentes.
La investigación permitió a los científicos extraer los compuestos activos de las plantas medicinales, lo cual condujo al desarrollo de medicamentos farmacéuticos y al rechazo de la medicina vegetal.
Para 1920 la dedicación de Rene-Maurice Gattefossé, químico francés, descubrió las propiedades medicinales del aceite esencial de lavanda cuando lo aplicó a una quemadura sobre su mano después de sufrir un accidente en su laboratorio, en donde descubrió e inició una modesta revitalización de los aceites vegetales. En 1928 Gattefossé, acuñó el término «aromaterapia» para resumir el efecto curativo de los aceites esenciales. Y su libro libro Aromathérapie fue publicado en 1937 el cual más tarde fue traducido al inglés.
Más tarde el Dr. Jean Valnet, cirujano de la armada francesa, utilizó con éxito los aceites esenciales para tratar a los soldados heridos en combate y a los pacientes de un hospital psiquiátrico. En 1964 Valnet publicó The practice of aromatherapie, que aún muchos consideran la biblia de la aromaterapia.
Para los años 1950, Margarita Maury, terapeuta de la belleza y bioquímica austriaca, introdujo la idea de utilizar los aceites esenciales en los masajes y, junto a su esposo francés homeópata, establecieron las primeras clínicas de aromaterapia en Bretaña, Francia y Suiza. Posteriormente algunos fisioterapeutas, enfermeras, cosmetólogos, masajistas, doctores y otros profesionales de la salud empezaron a utilizar los aceites esenciales como alternativa en vez de antibióticos.
El 19 de mayo de 2012 se inauguró el primer museo en España dedicado al sentido olfativo en la pequeña localidad de Santa Cruz de la Salceda (Burgos).

Usos de la aromaterapia
La aromaterapia es el uso de aceites esenciales puros de plantas aromáticas (como la menta, aní, canela, orégano y romero) para ayudar a aliviar los problemas de salud y mejorar la calidad de vida en general. Las propiedades curativas de la aromaterapia son reconocidas por promover la relajación, el alivio del dolor y la reducción de los síntomas depresivos. Así mismo, la aromaterapia se ha utilizado para reducir la conducta alterada, para promover el sueño, y para estimular el comportamiento motivacional de las personas con demencia.
Los aceites esenciales de diferentes plantas han sido usados para propósitos terapéuticos desde hace cientos de años. Los chinos, hindúes, egipcios, griegos y romanos usaron los aceites esenciales en cosméticos, perfumes y medicinas. En Mesoamérica eran utilizados los aromas de las flores y algunas plantas en infusiones para baños corporales. Hipócrates utilizaba sahumerios (inciensos) fragantes para desembarazar a Atenas de la peste y los soldados romanos se bañaban en aceite aromático y se masajeaban regularmente con la creencia que ello les mantenía fuertes.
La aromaterapia utiliza la inhalación de los vapores de aceites esenciales, vía oral para tratar o aliviar los síntomas físicos y emocionales. Los aceites esenciales no deben usarse puros en la nariz, en los oídos y en las zonas ano-genitales. Tampoco deben aplicarse en los ojos.
Los aceites esenciales de calidad máxima 100% biológicos nos aseguran resultados óptimos y, además, reducimos considerablemente posibles reacciones alérgicas, provocadas en la mayoría de los casos por aceites esenciales adulterados o de mala calidad.
Para un uso terapéutico vía oral y para aromatizar nuestros platos y postres es necesario comprar aceites esenciales preferiblemente de cultivo ecológico y quimiotipados (forma de clasificación química, biológica y botánica sobre todo de los aceites que hay en una planta y que designa la molécula con mayor presencia en dicho aceite o aceite esencial puro y permite definirlo terapéuticamente de forma clara y segura).
Para tomar en cuenta:
- Es importante señalar que la mayor parte de los aceites esenciales no pueden aplicarse en su estado puro directamente sobre la piel, ya que son altamente concentrados y pueden quemar la piel.
- Antes de aplicarlos es necesario diluirlos en otros aceites (coco, almendra, jojoba, aguacate), conocidos como aceites base o aceites portadores, o en agua.
- Preferentemente los aceites esenciales no deben ser ingeridos.
- No deben entrar en contacto con los ojos. En caso de hacerlo deben lavarse los ojos con abundante agua, evitando presionar con las manos.
- Deben de usarse con moderación en mujeres embarazadas y niños.
- No confundir los aceites esenciales con los aceites sintéticos, su calidad es muy inferior a los aceites esenciales y si son aplicados en la piel causan quemaduras y alergias.
¿Cómo penetran los aceites esenciales en el sistema humano?
La aromaterapia nos trabaja los sentido olfato-tacto ya que de ellos depende el beneficio de los aromas. Las investigaciones han demostrado que las personas responden a los olores a un nivel emocional superior que al de los otros sentidos. Un aroma puede desencadenar toda una sucesión de recuerdos casi olvidados – la zona del cerebro asociada con el olor es la misma que la de la memoria.
La región olfatoria es el único lugar de nuestro cuerpo donde el sistema central está relacionado estrechamente con el mundo exterior, de este modo, los estímulos olfativos llegan directamente a las centrales de conexiones más internas de nuestro cerebro. Las neuronas de la región olfatoria son neuronas sensitivas primarias y forman parte de las neuronas cerebrales.
Por otra parte, cuando se huele algo se evoca la memoria emocional, la que puede relacionar las emociones. Así, la memoria asociativa de aromas y situaciones generan el aprovechamiento de los aceites para uso terapéutico, pues la conciencia registra el aroma con la ambientación. Algunos aceites tienen la propiedad de transformar y equilibrar nuestras emociones, reduciendo la ansiedad, la depresión o la fatiga mental. Lo podríamos ilustrar de la siguiente manera: Si no has comido durante un tiempo y hueles alguna comida en proceso de cocción, las instrucciones son enviadas a tu sistema digestivo para que se prepare -e inmediatamente sientes hambre! Aunque no todo el mundo posee todas las formas posible de hendidura en sus cilios, lo que explica por qué algunas personas no son capaces de oler ciertos aromas.
Muy poco del aceite liberado en el aire para ser inhalado sube a la nariz (la mayoría flota en los alrededores) y probablemente sólo una pequeña proporción de éste llega al cerebro o los pulmones, y desde allí, al resto del cuerpo. Menciono ésto con el fin de mostrar lo poco de aceite esencial que en realidad entra en el cuerpo y, por lo tanto, de lo poco que se necesita para sentir su efecto.
La aromaterapia actúa sobre los planos sutiles por ello ayuda a la meditación, visualizaciones, concentración y a todas aquellas técnicas destinadas a buscar el equilibrio y armonía interior. El usar el tacto es un instinto humano y una necesidad fundamental. La cultura humana ha empleado persistentemente el tacto como medio de comunicación, o bien en un contexto terapéutico o simplemente como expresión de solicitud y afecto. Es por ésto que los masajes son parte fundamental en la aromaterapia terapéutica.
Modo de almacenamiento
Al ser sustancias naturales, tan pronto abrimos el envase su oxidación empieza a crearse. Es bueno tomar en cuenta los siguientes puntos:
- Estamos acostumbrado a ver los aceites esenciales en botellas de colores, más que en claras, y hay una buena razón para ello. Los aceites esenciales se deterioran en la luz del sol – más rápido en el extremo azul del espectro que el rojo. Ésta es la razón por el cual las botellas de color marrón ámbar son consideradas como las mejores, las azules son también utilizadas, pero si se encuentran en botella negra, ¡sería aún mejor!.
- En frascos cerrados y almacenados correctamente en un lugar preferiblemente oscuro o con poca luz se conservan 5 años o más. Aunque en condiciones muy favorables se pudieran conservar de 30-40 años, pero sabemos que no hay necesidad para ello, un promedio de tiempo podría ser 2-3 años.
- Evitar la luz solar directa; ventanas, estantes de sol (y estantes en radiadores), etc. Un lugar cálido no es bueno para los aceites esenciales, sobre todo si la botella no está llena; el oxígeno en el espacio de aire puede atacar el aceite y causar deterioro.
- Cuando mezclamos los aceites esenciales con aceites vegetales (jojoba, almendra, coco, aguacate, etc.) su duración pasa a ser la misma que la del aceite con el que mezclamos y sus cualidades se reducen considerablemente de 9-12 meses.
- Lo aceites de cáscara de cítricos no tienen una vida tan larga, porque los aldehídos tienden a convertirse en ácidos. Ésto puede ser retrasado manteniéndolos en la nevera, pero luego las ceras (no presentes en el aceite destilado) podrían precipitarse. Ésto no afecta al contenido químico terapéutico que posee el aceite – sólo hace que el aceite se opaque. Las ceras pueden ser filtradas – teniendo mucho cuidado.
- Evita el uso de aceites esenciales fotosensibilizadores antes de exponerte al sol (son principalmente las esencias de cítricos extraídas de la corteza: bergamota, limón, mandarina, naranja, pomelo).
- Mantén los aceites esenciales fuera del alcance de los niños.
Nota: Nunca dejes una botella de aceite esencial puro sobre una superficie pulida, pintada o en plástico; éstas pueden ser susceptibles a los químicos en el aceite y si es así, serían dañados.
Aparte de todos estos puntos y precauciones, utilizar los aceites esenciales es bastante fácil. Lo compras y echas un par de gotas en un disipador y listo. O puedes olerlo directamente desde la botella, o si es orgánico, puedes aplicar una gota al agua de tu comida, té o como prefieras.
Realmente es algo extremadamente sencillo, pero agradable y muy beneficioso. El punto más importante para tomar en cuenta, es comprar de marcas de alta calidad y no comprar nada con reclamaciones como, «grado terapéutico, grado alimenticio, etc.», ya que éstos grados no existen porque no existe este tipo de estándar.
Si tienes duda al comprar cualquier aceite esencial, puedes contactar a Alan Santana, suscribiéndote a Salud Casera y preguntar antes de hacer tu compra. Al principio, casi siempre se cometen errores, pero si preguntas, te puedes saltar unos pasos.
Fuentes:
http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmedhealth/PMHT0024879/
The Art of Aromatherapy by Robert B. Tisserand
Aromatherapy Workbook by Shirley Price
Ricardo Cruz dice
Hola, me confunde que algunas veces mencionas que existen Aceites que pueden ser tomados con agua y otras veces mencionas que no se debe, puedes explicarme bien?
Gracias
Alan Santana dice
Los aceites esenciales, si son puros y orgánicos, la mayoría de pueden tomar diluidos en agua, jugos, platos, batidos, té o como prefieras. De los que mencionamos en Salud Casera, todos se pueden tomar internamente, la dosis va a depender del aceite y los beneficios que andas buscando. Algunos aceites son bien fuertes, como el de canela, clavo dulce y orégano, así que hay que empezar con una pequeña cantidad o utilizarlo de otra forma si no sabes lo que estas haciendo. Por ejemplo, se puede echar en una capsula y tomar así.
María del Carmen dice
Por favor como se utiliza el aceite de incienso para tratar un Cancer de próstata en estadio 4con metástasis periférica
La quimio no funcionó y está con tratamiento hormonal .
Muchas gracias
Alan Santana dice
Ese tema no es tan sencillo. Puedes agregar varias gotas en la suela de los pies o ponerlas debajo de la lengua, pero no será suficiente, especialmente después de la quimioterapia la cual destruye el sistema inmunológico completo.
Tienes que cambiar toda la alimentación, fortalecer el sistema inmunológico con antioxidantes, vitamina C, hongos y hierbas medicinales. Necesitas hacer un detox completo. También puedes utilizar zumos de vegetales y muchas otras opciones que puedes encontrar en cancertutor.com. Además puedes investigar sobre la terapia Gerson o vitamina C intravenosa.
norma lopez dice
Donde puedo conseguir el aceite esencial de incienso
Alan Santana dice
Lo puedes conseguir aquí: (http://www.saludcasera.com/productos-naturales/#eos)
Tomás Caballo dice
Gran artículo, y muy muy completo.
Gracias!
Rosa maría dice
Hola, Gracias por toda la información.
1) Desearía saber si el aceite de incienso puede ser ingerido, de ser así, se debe de mezclar con algún liquido?
2) Se puede aplicar directamente en la piel sin mezclar con ningún aceite o crema conductora?
3) Como puedo utilizar el aceite esencial de jara y que propiedades tiene.
Un abrazo
Alan Santana dice
Hola Rosa,
1) El uso recomendado normalmente es externo.
2) Lo puedes aplicar directamente a la piel, normalmente se aplica en la frente, la suela de los pies, pecho o donde prefieras. No hay necesidad de diluirlo.
3) Este aceite es bien conocido por su efecto de meditación, donde se dice que reduce la velocidad de la mente para promover la concentración más profunda. También es una herramienta muy poderosa en la lucha contra el envejecimiento de la piel donde ofrece actividad astringente significativa para la tonificación y fortalecimiento de la misma. En aromaterapia este aceite se utiliza en cuidado de la piel contra el envejecimiento, así como para reducir el sangrado y es un favorito en estas aplicaciones.
Como con los demás aceites, se puede diluir en un aceite portador o agregar a un disipador de aromas.
Ramona Alvarez dice
Muchas gracias por tu ayuda en enseñarnos a cuidarnos mejor, en cuerpo , mente y espíritu. So muy beneficioso para nuestra salud total