Einstein lo dijo claramente: “Todo lo que nos rodea, incluidos nosotros mismos, está hecho de energía”. Tiempo después Deslauriers reafirmaría este concepto con sus propias ideas: “Todo consiste en energía. Cuando hablamos de energía pensamos en una fuerza invisible, indefinida. Incluso los objetos sólidos son intensos sistemas de energía. Lo que llamamos sentimientos o humor, son de hecho, flujos de energía”.
Sin embargo, es muy diferente una energía proveniente del mundo natural comparado a una energía creada por el hombre. El ser humano por naturaleza cuenta consigo una nata compatibilidad con todos los reinos vivientes, ya sea el mineral (rocas), el vegetal o el animal. Y dicha compatibilidad energética no se altera entre sí, de hecho se complementa. Pero todas aquellas fuentes de energía emanantes creadas por el hombre, tales como los satélites, radares, teléfonos celulares, por mencionar algunos, resulta ser energía que altera y crea un campo electromagnético sobre nuestra energía sanadora natural. A ésto hoy en día se le conoce como campos electromagnéticos.
Pero, si miramos por un momento hacia nuestro alrededor estamos literalmente rodeados por la tecnología inalámbrica y la contaminación electromagnética. Desde la radiación de teléfonos celulares a Internet Wi-Fi a los electrodomésticos inalámbricos y aparatos electrónicos, el aire está lleno de frecuencias electromagnéticas.
Estamos siendo bombardeados constantemente por diversos flujos de energía que alteran nuestra energía natural, trayendo como consecuencia un daño y desbalance celular el cual se ve reflejado con diversas enfermedades, dentro de las cuales se encuentran el desarrollo de tumores, infertilidad/esterilidad, dolores de cabeza, migrañas, dificultad para concentrarse, TDAH, tinnitus e insomnio en muchas personas. De hecho, muchos expertos en salud creen que estas frecuencias podrían llevar a problemas más graves como la enfermedad de Parkinson, la arritmia y cáncer. En pocas palabras, una alteración de la genética.
Y, por cierto, si no usas personalmente la tecnología inalámbrica, sigues estando expuesto por los dispositivos de tus vecinos. Dado que esta tecnología es relativamente nueva, nadie está seguro de cuáles pueden ser los efectos de la exposición a largo plazo.
¿Cómo funcionan las señales inalámbrica y radio frecuencia?
El Dr. George Carlo, considerado como la máxima autoridad a nivel mundial en el área de investigación sobre las señales inalámbricas y de radio frecuencia, nos dice lo siguiente:
La mayoría de las señales inalámbricas transportan información en un rango entre los 1900 y 2000 megahercio (MHz). El corazón late a 2 hercio (hertz en Inglés), 2 ciclos por segundo. Por lo tanto, 1900 MHz son 190 millones de ciclos por segundo. Esa frecuencia aislada es tan alta que el tejido biológico no puede reconocerla. Debido a que esta carga energética es demasiado para la membrana celular (parte interior de cada célula), no la puede diferenciar entre buena o mala en lo absoluto y simplemente la interpreta como mala porque no sabe lo que es ya que dichas ondas energéticas (de información) no existen en la naturaleza.
Todo ésto da lugar a un mecanismo de defensa y protección llamado ‘Endurecimiento de la membrana celular’, es decir, la permeabilidad (la facilidad de entrar o salir de algo) de la membrana celular se compromete, teniendo como resultado el hecho de que los nutrientes no pueden entrar a la célula y los productos de desecho (toxinas) no puedan salir de ellas.
Protección contra los campos electromagnéticos de la tecnología inalámbrica y la radiación de los teléfonos celulares
Desafortunadamente, las actuales directrices de la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) están anticuadas y no reflejan los peligros potenciales y los factores de riesgo de estas tecnologías. Si bien advierten contra daños térmicos, no hay advertencias sobre potenciales efectos no térmicos, a pesar de la creciente evidencia de estos peligros.
Debido a ésto, es esencial tomar medidas para protegerte a tí y tu familia. Las siguientes son siete maneras fáciles de crear una protección contra los campos electromagnéticos de las tecnologías inalámbricas y la radiación del teléfono celular:
1. Teléfono celular
La protección más eficaz contra la radiación del teléfono celular es dejar de usarlo. Si ésto no es posible, al menos reduce su uso distanciándote del dispositivo (tanto como sea posible) y apagándolo cuando no esté en uso.
2. Utiliza los auriculares
Si debes usar un teléfono celular, utiliza siempre una opción de manos libres, como un auricular o la función del altavoz del teléfono. Si utilizas un auricular, asegúrate de que es el estilo con cable que se conecta al teléfono; Bluetooth u otros dispositivos inalámbricos también emiten frecuencias dañinas.
3. Reduce la exposición a los campos electromagnéticos (CEM) en el hogar
Si tienes una línea terrestre, utiliza un teléfono con cable. También opta por conexiones de Internet por cable (Ethernet) – a todos los dispositivos de computadora – en lugar de inalámbrica (Wi-Fi). Además, elimina cualquier otro electrodoméstico y aparatos electrónicos que utilicen la funcionalidad inalámbrica o al menos apaga sus capacidades inalámbricas.
4. No seas demasiado «inteligente»
Evita el uso de la tecnología inalámbrica de «medidor inteligente» para tu hogar. Recuerda, los contadores inteligentes son tóxicos y se deben evitarse cueste lo que cueste. Y, en cuanto a todos los refrigeradores de la tecnología «inteligente» y otros aparatos, no malgastes tu dinero en estos peligros para la salud.
5. Protege los grupos vulnerables
Mientras que todos podemos potencialmente estar en riesgo de los efectos negativos para la salud de la radiación de teléfonos celulares y otras tecnologías inalámbricas, algunos grupos están en un mayor riesgo. Los bebés, los niños pequeños y los adolescentes que aún están en desarrollo, y los efectos de la exposición a campos electromagnéticos podrían afectarlos más profundamente. Los científicos de Yale y Harvard encontraron recientemente una correlación entre la radiación del teléfono celular y el deterioro del desarrollo cerebral en los niños no nacidos.
6. Cristales de balance cuántico
Los cristales cuánticos están infundidos con frecuencias específicas y beneficiosas, las cuales optimizan la salud y la energía vital de todos los seres vivientes, incluyendo las plantas y los animales. Una de las frecuencias infundidas es la aclamada frecuencia del amor resonando en 528 Hz, además de otros antiguos tonos de solfeo comúnmente usados en prácticas de meditación y sanación.
Las personas que usan un cristal de balance cuántico experimentan un proceso llamado “Centramiento exponencial de transformación” (CET), que se caracteriza por un sentimiento asombroso de calma y conexión a la tierra. Algunos de los muchos beneficios del CET que han sido reportados son mejoras en balance, rendimiento, fuerza, resistencia, concentración, claridad, mejor sueño, vitalidad y un aumento en el sentimiento de bienestar en general. Cuando se usa constantemente, el usuario disfruta sin esfuerzo de expansión y estabilización de estos beneficios.
Los cristales cuánticos neutralizan los efectos negativos de los campos electromagnéticos.
7. Conéctate con la tierra (Earthing)
Así como el sol nos da calidez y vitamina D, la Tierra bajo los pies nos da alimento y agua, una superficie para caminar, sentarte, ponernos de pie, jugar y construir, y algo que nunca, has pensado – una eterna, natural y suave energía. Piensa en ésto como quizás vitamina T- T de tierra. ¿Qué significa eso? Tal vez la diferencia entre sentirse bien y no tan bien, de tener poca o mucha energía, o dormir bien o no tan bien. No se puede ver la energía de la Tierra, pero algunas personas pueden sentirla como una sensación cálida y un hormigueo agradable cuando están caminando descalzo (earthing) por el borde del agua en la playa o en un tramo de hierba humedecida por el rocío.
Entrar en contacto con la tierra anula instantáneamente los efectos negativos de los campos electromagnéticos.
Es bueno tener presente que las madres embarazadas, los ancianos, los discapacitados y las personas con enfermedades graves podrían estar arriesgando su salud, ya que son más susceptibles a los efectos negativos de los campos electromagnéticos generados por las tecnologías inalámbricas. Incluso los hombres en edad reproductiva podrían experimentar efectos negativos sobre su fertilidad. Si bien todo el mundo podría estar en riesgo, asegurar que los grupos vulnerables tengan protección de la radiación electromagnética es especialmente importante.
Así que ponte tu cristal, apaga el celular y sal a conectarte de la tierra con algún ser querido y verás lo bien que se siente estar desconectado.
Fuente:
-http://www.naturalhealth365.com/emf-protection-2083.html
-http://biorxiv.org/content/biorxiv/early/2016/05/26/055699.full.pdf
-http://www.baltimoresun.com/health/blog/bal-cell-phones-child-brain-story.html
-http://www.naturalhealth365.com/cell-phone-radiation-brain-cancer-1936.html
Raul Said dice
Hola Bella
Supongo que también sirve utilizar la lámpara de sal de Himalaya que ustedes sugieren para eliminar los eones positivos.
A menos que este equivocado te pido Bella me lo hagas saber
Nuevamente gracias por todos sus valiosos consejos
Alan Santana dice
Definitivamente. Mientras más lámparas mejor, o mientras más grande la lámpara mejor. Tan pronto las tengas vas a notar la diferencia. Nosotros tenemos 2 en la habitación, 1 en el baño y otras 15 alrededor de la casa.
Puedes durar una semana utilizándolas y ver como te sientes, luego apagarlas por unos días y notarás claramente la diferencia en el ambiente. Los distintos cristales, generadores de iones negativas, alfombras de earthing y acumuladores de energía de orgón, todos funcionan para contrarrestar el daño causado por los campos electromagnéticos y aumentar las vibraciones de tu energía natural.
Ivan dice
la licuadora ,camara de fotos , estaran en la categoria de mejor evitarlos pues yo alquilo un cuarto y duermo cerca de estos
Alan Santana dice
No hay problema con esos, los aparatos electrónicos más peligrosos son aquellos que utilizan tecnología inalámbrica, ya que emiten ciertas frecuencias para poder funcionar. Aún así, puedes descontar y apagar los aparatos cuando no los estés utilizando y así no hay problema.